En Colombia, cada 21 de febrero se conmemora el Día Nacional de las Lenguas Nativas para rendir homenaje a las comunidades y sus lenguas. Un día para celebrar la diversidad etnolingüística, el cual se ha convertido en uno de los vehículos más poderosos para conservar y desarrollar el patrimonio inmaterial y cultural del territorio colombiano.
No obstante, esta riqueza es producto de los complejos procesos históricos de colonización, esclavización, migración y mestizaje que acontecieron en nuestro territorio por más de 400 años.
En la actualidad existen 68 lenguas nativas habladas por cerca de 850.000 personas en nuestro país: 65 son lenguas indígenas o indoamericanas; dos lenguas criollas, creadas y desarrolladas por comunidades afro-descendientes en San Basilio de Palenque y en el Archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina; una romaní, la lengua del pueblo gitano, de origen indo-europeo, introducida por migrantes más recientes y hablada por unas 6.000 personas; y adicionalmente, se reconoce como parte de la diversidad cultural, la lengua de señas colombiana (LSC), dado que esta tiene características gramaticales propias.
Bajo este panorama, nació la Ley 1381 de 2010, que busca el reconocimiento y la difusión de las lenguas nativas, a través de la cual el Ministerio de Cultura ha implementado acciones para la protección, reivindicación y fortalecimiento de la diversidad etnolingüística, con el objeto de generar sentido de apropiación por parte de la sociedad colombiana.
Es así como desde hace ocho años se vienen adelantado acciones para el desarrollo de procesos de traducción a las lenguas nativas de documentos de interés nacional, entre muchas acciones que suman a la conservación y desarrollo del patrimonio tangible e intangible de nuestro país.
Si usted está interesado en obtener más información sobre el Día Nacional de las Lenguas Nativas, puede visitar este enlace. Ahí encontrará documentos como la traducción hecha en 2016, del ‘Acuerdo final para la terminación del conflicto armado’, a 66 lenguas nativas; la Convención sobre los Derechos de las personas con Discapacidad (2015) o el proyecto de fortalecimiento y recuperación de las lenguas indígenas del Amazonas. 