Periodismo en Colombia en alerta tras una nueva oleada de amenazas

En los últimos días el periodismo en Colombia ha sufrido una nueva oleada de amenazas de muerte a reporteros y comunicadores. El pasado sábado, Jineth Bedoya, editora del diario El Tiempo fue señalada como “objetivo militar inmediato”, a través de en un panfleto atribuido al comando central de las Águilas Negras.

Informar siempre ha sido una actividad de riesgo en nuestro país, un ejemplo de ello, es que en solo tres días los periodistas Jorge Espinosa, Juan Pablo Latorre, Yolanda Ruiz, María Jimena Duzán, Jineth Bedoya, Catalina Vásquez y el equipo periodístico de La Silla Vacía, han sido víctimas de amenazas.

Cabe decir que la Fundación para la Libertad de Prensa (FLIP) y la Asociación de Prensa Internacional de Colombia (APIC) alertaron sobre el incremento de las amenazas de muerte a los comunicadores del país.

«Ricardo Ruidíaz (región del Magdalena Medio), Catalina Vásquez (Antioquia), Jhanuaria Gómez (Antioquia) y Laura Montoya (Putumayo), han sido intimidados en diferentes circunstancias», denunció la FLIP.

En lo corrido de 2018, la FLIP ha registrado un aumento en el número de amenazas contra periodistas con respecto al año anterior. Mientras que para julio de 2017 la Fundación documentó 65 casos de amenazas, este año se han reportado 89 intimidaciones, una cifra que acentúan una tendencia preocupante.

Por otro lado, la Asociación de Prensa Internacional de Colombia (APIC), manifiestó su preocupación y profundo rechazo a las amenazas que sufren María Jimena Duzán, Jineth Bedoya, Yolanda Ruiz, Jorge Espinosa y Juan Pablo Latorre, así como el portal La Silla Vacía, en función a su labor periodística.

Pedro Vacca, director FLIP
Pedro Vacca, director FLIP.

Teniendo en cuenta la dificultad que han tenido las autoridades para investigar este tipo de amenazas, la FLIP ha solicitado a la Fiscalía General de la Nación que busque el apoyo de expertos en delitos informáticos de otros países para dar con el paradero de los responsables de estas intimidaciones y que reciban las sanciones judiciales correspondientes.

Amanecerá y veremos.