[Columna] Arrancó el 2016 con nuevos proyectos y nuevas ideas a desarrollar para divertirnos y tener más crecimiento en el periodismo independiente, como por ejemplo escribir columnas de opinión. En mi caso, no soy el mejor escritor, ni pretendo serlo, tan sólo quiero reflexionar y lograr un buen estilo.
En esta ocasión quiero opinar sobre algo que pienso y es que se están burlando de Colombia. Ayer leí una noticia en el diario El Colombiano de Medellín sobre cómo un locutor de un programa deportivo de la Cadena española COPE le jugó una broma telefónica al presidente Juan Manuel Santos. Tengo que decir que la broma no ofende ni es de mal gusto, pero es una broma.
¿Nos reímos o reflexionamos? Un español brominado al presidente de Colombia, haciéndose pasar por alguien que conoce a James Rodríguez, simplemente por reírse al aire de Santos y lograr que se hable de nuestro país en todo el mundo.
Y no sé ustedes pero tampoco me parece chévere lo que sucedió con Ariadna Gutiérrez, ella vivió uno de los sucesos más vergonzosos en la historia de la televisión a nivel mundial, simplemente porque Steve Harvey cometido un error, ocasionando burlas a todo un país.
Colombia viene sonando desde hace unos años en el sentido que nos ha costado quitar esa imagen negativa que ha marcado nuestra historia, y venderle al mundo nuestra manera de ser, nuestra cultura, nuestra belleza y lo que somos, no ha sido fácil, sin embargo, con esas bromas y hechos bochornosos no se respeta nuestro esfuerzo, esto solo logra que a nuestro país puedan cogerlo de ruana, burlarse y pasarnos por la galleta. Un ejemplo.
No obstante, hace un tiempo trabajaba en un bar como mesero y casualmente un día tres turistas demasiado borrachos se subieron al techo del bar. Nunca supe que se habían tomado ni qué droga se habían metido, pero ¿qué hubiese pasado si un gringo de esos se cae del techo?… Y con el pasar de los días me hice esta pregunta, ¿qué pasaría si tres colombianos en otro país se suben al techo de una bar ebrios y drogados?
En nuestro país a estos gringos no les hacemos nada, sólo bajese del techo, pague una multa y váyase para su hostal. Pero a nosotros seguro nos meten a la cárcel y nos deportan.
¿Será que nos quieren coger de recocha o somos nosotros los que nos estamos dejando coger de recocha? Será que es un momento para que muchos colombianos nos pongamos serios con nuestros valores y esfuerzos y decir ¡No tienen porque burlarse de nosotros ni hacer bromas con nosotros! No tienen porque hacernos sentir mal delante de todo el mundo.
¿Será éste el año para que el mundo aprenda de los colombianos echados pa’ lante? Que aprendan de nuestra humildad, nuestra sencillez, nuestra espiritualidad, las historia que nos ha sucedido y que tenemos. Así que fijense en estos detalles bromistas y Harvey’s, no en tomarnos del pelo o en hacernos quedar mal universalmente.