Sáb. Jul 27th, 2024

Infancia Clandestina no es una película ligera, pero llama mucho la atención verla con el enfoque político que se podría desconocer en cuanto a guerras internas de países vecinos.

En 2012 el argentino Benjamín Ávila estrena su película Infancia Clandestina, escrita junto a Marcelo Müller, cuyos actores principales son Teo Gutiérrez Moreno, Ernesto Alterio, Natalia Oreiro y César Troncoso.

Un película ganadora de numerosos premios, además, en 2013 fue elegida y preseleccionada por la Academia Argentina para participar en los Premios Óscars y en los Premios Goya.

Foto | Tomada de Internet.

El día de hoy quiero compartir con los lectores bizarromesa.com esta recomendación, ya que desde hace algunos meses la plataforma de Netflix la ha mantenido en su franja selectiva de películas latinas.

¿De qué trata?

Infancia Clandestina está basada en hechos reales, ambientada en la Argentina de 1979, durante la última dictadura cívico-militar y la contraofensiva de Montoneros, guerrilleros revolucionarios de la izquierda peronista que deseaban la caída del régimen fascista que gobernaba el país en ese momento. 

La historias es narrada por Juan, un niño de 12 años que vuelve a su país junto a su familia, después de haber estado exiliado en Brasil, México y Cuba. 

Dentro de la ciudad Juan debe cambiarse el nombre igual que sus familiares, ya que estos hacen parte del grupo que son la ofensiva de la dictadura, es entonces cuando la vida de Juan empieza a tornarse de muchas vivencias al conocer a María, una compañera de la escuela con la que desea alcanzar sueños utópicos.

La película es una mezcla de cocteles sentimentales, los cuales están tornandos de amor, alegría, dolor, valentía y el miedo, que son muy bien transmitidos por las técnicas cinematográficas empleadas por Benjamín, su director.

La elección de la música que acompaña las escenas, la iluminación, el claroscuro, el ralentí que además va prefiriendo primeros planos para subrayar la intensidad de ciertos momentos, además del uso particular e innovador como una muestra del comic en la película, dejan un entorno gratificante de no violencia explícita en momentos que el crescendo del argumento se torna más negro.

En Infancia Clandestina podemos ver como el sello del dibujante Andy Riva se plasma en elementos de pseudo animación asociados con giros altamente organizados. Un película que se juega con dos facetas distintas, la cuales resultan siendo una exploración sobre la verdad de la memoria. 

Temas tan culturales y con un entorno social de guerras y fantasías que la hacen tan real en cada época, donde no podría faltar las dosis en temas de jerarquías sexuales y la estructura narrativa de una historia sobre la llegada a la adultez, personajes que enamoran al espectador como El Tío Beto mentor de Ernesto, que funciona en el film como el comunicador primario en representación de la masculinidad visualmente. 

Sin duda alguna, un drama de emociones contrastadas que suscita una sensación muy rara de angustia durante las horas que transcurre la película.

Finalmente, Infancia Clandestina no es una película ligera, pero llama mucho la atención verla con el enfoque político que se podría desconocer en cuanto a guerras internas de países vecinos. 

Autor | Edwin Medina
Cine – Sociedad